Conocerse para competir

“Ser valiente consiste en estar muerto de miedo y, a pesar de ello subirse al caballo”.

Cuando algo nos supone un reto, un temor ante lo que podemos no conseguir, no llegar a hacer o incluso fallar, surge esa enemiga mortal para algunas personas que es la ansiedad. Se le puede llamar por diferentes nombres: ansiedad, nerviosismo, tensión, pero finalmente las sensaciones son las que son y como deportistas hay que ser capaz de identificarlas para dominarlas o al menos, no dejar que nos dominen a nosotros. Es importante identificarlo porque ser consciente del problema es la mitad de la solución.

Normalmente no es la ansiedad en sí misma la que nos hace cometer errores, ya que todos la sienten en mayor o menor medida, sino que cuando nos ponemos nerviosos, empezamos a realizar cambios en la dinámica o rutina que es lo que hace que acabemos equivocándonos. Esa es la diferencia entre quien domina su ansiedad y quien es dominado por la ansiedad.

Photo by Pixabay on Pexels.com

Por ejemplo, un tenista que siempre realice el saque de un modo y que por ponerse nervioso por cerrar el partido empiece a girar más la muñeca para ajustar la bola a la línea, lo más seguro es que acabe saliendo la pelota y haciendo doble falta, mientras que si hubiese sido capaz de continuar con su dinámica de un modo concienzudo, probablemente habría terminado ganando.

Aunque es cierto que las victorias no dependen solamente de los jugadores sino que hay muchos más factores en juego, lo importante es que el deportista no se vaya con la sensación de haber fallado por haber querido cambiar las cosas, sino que sepa que ha hecho lo mejor que ha podido y aunque en esta situación el contrario pueda haber sido mejor, las sensaciones han sido buenas y con tiempo se puede lograr.

Photo by Gonzalo Facello on Pexels.com

Como se dice anteriormente, los resultados pueden acompañar al deportista o no, ya que muchas veces no depende de él exclusivamente. Puede que se enfrente con alguien que ese día tenga más suerte, haya entrenado más tiempo o simplemente ese día se encuentre confiado. Es por eso por lo que no todo se puede basar en los resultados. Los resultados tienen que ser una variable más entre otras para conseguir construir la confianza del deportista, que finalmente es la que va a hacer que el deporte sea gratificante. Para ayudar a la confianza nos tenemos que fijar también en el trabajo realizado a lo largo del tiempo que lleva entrenando, no solo a nivel cuantitativo sino también cualitativo. Además, existe un factor que no depende de nosotros que es el talento. Si bien es cierto que entrenar puede hacer que seas un gran deportista, no cabe duda que hay personas que nacen con talento para determinadas cosas, y con la misma cantidad de trabajo, destacan más que sus compañeros.

Vamos a ver unos consejos para tolerar la presión ante la competición.

  • No hagas especial ninguna situación
  • Basa tu confianza en la preparación, talento y resultados.
  • Cambia amenazas por retos y, limitaciones por posibilidades.
  • Date cuenta de los cambios que haces como consecuencia de la presión

Espero que leyendo este artículo hayas conseguido entenderte un poco más a ti y a los demás.

Si tienes cualquier tipo de problema o notas que podrías necesitar ayuda, no dudes en consultar con un especialista.

Publicado por eliapesquera

Psicologa Sanitaria M-33188

3 comentarios sobre “Conocerse para competir

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

A %d blogueros les gusta esto: